25 de enero de 2009

Bye, phone, bye...

El móvil ha dicho "se acabó...". Se veía venir, llevaba mucho tiempo dando problemas.

Gracias al programa que traía cuando lo compré, en esta última semana he conseguido sacar casi todo lo que tenía guardado: fotos, mensajes enviados y recibidos (algunos con gran valor sentimental), vídeos...

Y varios mensajes que tenía en 'borradores', mensajes que no recordaba. Para muestra, un botón:

------------------
Te echo tanto de menos que ya no sé extrañarte;
mi alegría en la mañana,
mi tempestad dormida.

Te deseo tanto que me saturas;
alimento de mi alma,
inmadura fruta prohibida.

Te necesito tanto que me asfixias;
caricia de terciopelo,
suave manto de espinas.

Te amo hasta más no poder.
Te amo hasta el punto de odiarme...
Te amo hasta el punto de odiarte.

------------------

En fin. No recuerdo ni para quien era...
A lo que iba. Si queréis algo, no me llaméis (no sirve de nada), enviadme un SMS o un email. O dejadme un comentario por aquí, que siempre me da gusto leeros!

PD: me queda una semana -ocho días, en realidad- para volver por estos lares... ocho días... ocho días para ser libre... en el peor de los casos, libre hasta abril...

PD2: acabo de darme cuenta de que 'El Cánido de Pavlov' aparece en la lista de blogs de Gangas. Es un honor inmerecido, José María. Espero que, algún día, el ministro de turno reconozca, -porque lo mereces- tu incansable labor y tu apasionada dedicación. Un abrazo.

No hay comentarios: