28 de mayo de 2009


El otro día, Rajoy dijo a los diputados socialistas (y por la propiedad conmutativa, también a todos los socialistas) que NO SABÍAN LEER.

Hoy he recibido en mi buzón la carta que me envía Rajoy junto con los votos del PP. Aún no he salido de mi asombro al ver la jeta de este hombre que se atreve a decir, en su misiva, cosas que ni él mismo se cree.

En la carta, Rajoy invita a los españoles a que votemos al PP, cuya lista está encabezada por el señor Mayor Oreja, sí, ese que dice que con Franco vivimos plácidamente.
Rajoy sigue diciendo que España tiene problemas muy graves por culpa de (José Luis Rodríguez) Zapatero, pero no dice que los lugares de Europa en los que gobierna la derecha (Alemania, Italia, Francia, etc) también tienen problemas muy graves (de los que zapatero no tiene culpa alguna… no está de más la aclaración).

Rajoy también aprovecha la mala cifra de cuatro millones de parados para decir que hay que poner a este país a trabajar, pero no dice ni cómo, ni cuándo, ni dónde. Por lo menos, el Gobierno actual se está mojando el culo y está sacando a mucha gente del paro a través de la aceleración en las obras públicas. Mientras tanto, el PP sólo sabe criticar y no aplicar las medidas que dice tener ni en las comunidades donde gobierna.

También dice Rajoy que hay problemas de financiación para las familias y las empresas, pero no insinúa ni tan siquiera que los culpables son los bancos que han perdido liquidez y que han cerrado el grifo. A éstos, a los banqueros, ni los nombra porque no le interesa y porque no se atreve a hacerlo.

Dice Rajoy que hay que buscar un modelo económico más competitivo y más sostenible pero, en realidad, lo que nos dice es que la economía debe seguir mantenida a base de ladrillos aún sabiendo que ese ha sido el origen de muchos de nuestros actuales males.
Nos engaña Rajoy cuando intenta convencernos de que con el PP en el poder se va a reeditar la creación de empleo que ellos propiciaron cuando Aznar entró a gobernar, pero ya no existe la bonanza económica mundial que hizo esto posible, ni se pueden vender más empresas publicas (las vendió todas Aznar), ni se puede volver a crear la burbuja inmobiliaria porque todos conocen sus nefastos resultados… Ahora sólo podrían abaratar más el despido y quitarles impuestos a los más ricos y, con esas medidas antisociales, no lograrían nada.

Dice Rajoy que votarles a ellos es defender adecuadamente nuestros intereses en Europa, pero la realidad nos dice lo contrario…

Cuando mandaba el PP, los pescadores españoles las pasaron canutas a causa de las malas relaciones de Aznar con Marruecos y los agricultores vieron como sus cosechas se iban a la ruina porque el gobierno de Aznar permitía que Europa favoreciera a terceros países que sí pudieron vender los productos que cultivaban. Durante el mandato de Aznar no solo no se apoyó a las pequeñas y medianas empresas, ni a los autónomos, sino que se las atiborró con mayores impuestos tanto directos como indirectos.

Rajoy, en su carta, tiene la cara dura de decir que con ellos el medio ambiente y las ayudas sociales mejorarán….la verdad es que la experiencia nos dice que los gobiernos de derechas de nuestro país han arrasado con los pocos espacios vírgenes que nos quedaban (que vengan a la costa “virgen” de Lorca, Mazarrón y Águilas a decirles que estoy mintiendo, y que lo desmientan puerta por puerta, si se atreven) y, además, siguen negando el cambio climático. En cuanto a las ayudas sociales, si ganan, están decididos a recortarlas drásticamente… y no lo digo yo, lo han dicho ellos en mas de una ocasión.

Dice Rajoy que defender los intereses que él propone es contribuir a construir la Europa De Las Naciones… y eso es mentira. Lo que propone Rajoy es crear una cortina de humo acerca de la especulación y la corrupción que ampara en sus filas, en sus diputados y en sus consejeros regionales imputados. Rajoy no quiere crear nada, sino todo lo contrario. Rajoy lo único que quiere crear es un club de oportunistas espabilados que mediante sobornos, corrupciones, mentiras y chanchullos logren tener el poder suficiente para manejar públicamente nuestras vidas y nuestro destino a su antojo (y lo seguiré pensando mientas no expulse a sus aforados imputados).

Dice Rajoy que presenta un equipo curtido en Europa y eso, solo eso es verdad. En Europa se les conoce por sus posturas ultraderechistas, más próximas al neofascismo de Le Pen o al estilo mafioso del italiano Berlusconi que a una derecha moderna y democrática propia del siglo XXI (como pueden ser la derecha alemana y la francesa).

Resumiendo: la carta que Rajoy nos envía junto a las papeletas del voto es una mentira tras otra, fácilmente demostrable. Pero temo que, pese a ello, muchos caerán en la trampa de votarles sin, ni tan siquiera, haber leído la carta de Rajoy.

Y es que puede que Rajoy tenga razón… los socialistas no sabemos leer (“entre líneas”, supongo, quiso decir). Pero es que hay muchos de los suyos que, si los votan, es porque no saben leer. Y eso sí que es triste.

PD: Él tampoco es que escriba como Cervantes, y eso que es “de letras”, pero ya sabemos que a los máximos dirigentes populares les da por fardar: a unos les da por correr 20km en 10 minutos (véase Aznar “El Veloz”) y a otros les da por insultar. De todo hay en la viña del Señor.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mayor Oreja lleva desde noviembre de 2007 sin intervenir en Pleno del Parlamento Europeo. Un currante, vamos.