16 de abril de 2009

El imperio de la industria farmacéutica

Vídeo de presentación de las "Jornadas Farmacríticas", organizadas por estudiantes de Medicina de Zaragoza.

Os pongo el vídeo porque no tiene desperdicio alguno:




PD: Siento tardar tanto en actualizar, estoy liado con otras cosas y otros blogs!

6 de abril de 2009

Una profesora de la UCAM llama "enfermos" a los homosexuales.

La Universidad de Alicante invitó el pasado lunes 31 de marzo a dar una conferencia a Gloria María Tomás y Garrido, una profesora de Bioética de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) que definió a los homosexuales de "enfermos", entre otras declaraciones abiertamente homófobas. Las declaraciones las llevó a cabo en el Paraninfo de la Universidad de Alicante, dentro del V Curso de Ciencia y Sociedad, donde afirmó que la homosexualidad "es una enfermedad y, como tal, puede tener una solución". La profesora no sólo tuvo palabras para los gays, también recomendó a los bisexuales que antepusiesen su "dignidad" a la "libertad" y aseguró que todo lo que no es heterosexual es "perversión".




La 'miembra' en cuestión es profesora de la UCAM, Universidad CATÓLICA San Antonio, la misma universidad privada que ansía impartir el Grado de Medicina. No sé qué tipo de formación podrían llegar a impartir en dicha universidad cuando la ANECA les verifique el título... tengo mis dudas, sobre todo habiendo visto muchos, tantísimos casos de alumnos (de ISI, de Derecho, de Enfermería y Fisioterapia) de la universidad pública que, cuando no han logrado aprobar las asignaturas de su carrera y se han visto sobrepasados, deciden irse a la UCAM y allí van a curso por año y sacando nota.

No olvidemos que la mayoría de los alumnos de la UCAM no consiguieron entrar a la pública (UM) porque no les daba la nota... veo -y me parece- muy loable que haya personas que luchen contra los reveses de la vida y, ante una puerta que se cierra, busquen una salida:, en este caso: ingresar en la privada. Pero debemos evidenciar también que hay ciertas titulaciones donde la excelencia (en este caso, académica) es no sólo un pilar imprescindible, sino un requisito exigible y exigido. Y no hay mejor -ni más objetiva- forma de cribar 'la excelencia' de los aspirantes que hacerlo en base a su nota de selectividad.

Medicina es una de estas titulaciones de 'excelencia'. Para empezar, el acceso requiere de una magnífica nota de selectividad, mayor de un 8.5 en muchos casos (aunque, como dice un amigo: "La mejor nota es la que te permite elegir lo que querías elegir"). Para acabar, el material de trabajo del médico son las personas, por tanto, la excelencia en su profesión debe ser un objetivo inherente a la misma. Lo que pasa entre este comienzo, el acceso a la titulación, y el final, el ejercicio de la profesión médica, no lo podemos predecir, y no podemos saber qué parte de 'culpa' tienen el individuo en concreto y la propia sociedad sobre los cambios y la evolución de estas personas... Dicho de otra forma: no podemos predecir el comportamiento futuro de un estudiante/profesional sanitario. Hay muchos estudiantes 'de percentiles medios' que luego son 'los mejores médicos del mundo'; y también hay muchos estudiantes 'de percentiles altos' que luego pasan a formar parte (en mayor cantidad y con mayor frecuencia de lo que la gente cree) de 'la lacra del sistema sanitario'.

Por tanto, la excelencia académica y la profesional no siempre van de la mano, ni una conduce a la otra; pero no por eso podemos perder la objetividad en la selección, sería muy injusto, y por eso usamos la nota de corte como criterio de admisión. Y aún así hay trampas, atajos y parches para burlar los obstáculos que, a lo largo del camino, te forjan como persona... no obstante, anticipo: el sistema llegará a formar incultos sociales a medida que el dinero siga usando al conocimiento y no ocurra lo contrario.

Ni lo comparto ni lo respeto. No me gusta ese neoliberalismo del mercantilismo extremo, ese que reduce a una cifra abultada y discriminatoria todo el sacrificio y el conocimiento de quien se ha quedado fuera de la pública y no puede permitirse pagar el precio de la matrícula de Medicina en la privada, mientras otros con menos nota y más dinero logran su objetivo. Es un negocio discriminatorio. Esta universidad quiere comerciar con la medicina, es decir, además de con la educación, con la salud. Podría no compartirlo en absoluto y respetarlo, como ocurre con los casos de la Universidad de Navarra y la San Pablo CEU, ambas privadas y católicas y con un nivel científico indiscutible y una excelencia indudable... pero no podemos comparar, sería un serio agravio para una de las partes.

La pena es que, encima de todo, no hagan algo innovador -tal y como está el panorama, cualquier cambio puede ser a mejor-, que busquen lucrarse a costa de formar "Gradudad@s en Medicina" en lugar de médicos, tal y como la población los necesita. Pero claro, no debemos olvidar que hay una confusión evidente, una 'cortina de humo' y unos intereses creados.

Volviendo al principio... Ya digo que no sé qué tipo de formación podrían llegar a dar sin tener una plantilla de docentes cualificados (que dicen tenerla) y sin tener hospitales. (Actualización: el Gobierno Regional ya se los ha dado, quitándole plazas a la Pública, que llevaba exigiendo más plazas y había invertido mucho dinero en esos hospitales PÚBLICOS y UNIVERSITARIOS... Hospitales "públicos" para la universidad "privada"... y perjudicando al universidad pública... en fin.).

No sé que clase de Medicina llegarían a impartir -espero que no sea como la de San Vicente Mártir, de Valencia, cuyo plan de estudios decía: "Introducción a las ciencias de la salud: especialidad Medicina"-; lo que sí tengo muy claro es que no están autorizados para impartir Bioética; y mucho menos esta "profesora" que, en un alarde de imaginación (y de adoctrinamiento nacionalcatólico), echa por tierra las evidencias científicas que -interpreta- puedan atentar contra su sistema de valores y creencias (y que como profesora de alumnos de ciencias de la salud -"Bio-profesora, Bio-ética"- debería defender, y si no que revise el DMS-IV para así no faltar a la verdad), el marco legal vigente (que además se modificó en el año 2006) y uno de los principios de la docencia universitaria más sagrados (y que se sitúa en un escalón superior a la libertad de cátedra): el respeto a la verdad... el respeto hacia los oyentes de tu clase, tus sucesores, tus iguales bajo el umbral de la catedral del conocimiento, que son tu 'obra maestra' y tu aportación al mundo en el que nos ha tocado vivir, a fin de hacerlo un poco mejor... lástima que seamos tan pocos los que así vemos -vivimos- la docencia.


PD1: Se observa: 1. Que es locuaz. 2. Que argumenta bien. 3. Que ha estudiado el tema con profundidad. 4. Que sabe lo que dice y lo argumenta con buenos fundamentos. 5. Que se expresa realmente bien con verbo claro y sintaxis perfecta y perfeccionada. En fin, ¿esta persona es profesora de una Universidad???. Esta mujer se descalifica a sí mismo al abrir la boca. Cualquiera puede decir lo que quiera, pero al menos que lo diga bien.

PD2: A todo esto, ¿faltan médicos? Yo creo que no, pero hay quien no lo comparte.